Ya el panfleto monumental dedicado endiosar a Balaguer y su corte de asesinos, recibió su merecido inicial. Quienes oportunamente nos atrevimos a ejecutar esa decorosa acción, sencillamente interpretamos la indignación de una gran parte de este pueblo heroico y reivindicamos a nuestros muertos que no mueren.
Con Leonel Fernández, con Félix Bautista y García Espino, nosotros (as) no tenemos nada que hablar sobre este asunto. Ellos cometieron un delito imperdonable contra la verdad histórica y el patrimonio cultural de nuestra Nación y nuestra UASD, y no le queda otra opción que sufrir las consecuencias y echar atrás sus perversos propósitos.
Al Rector Roberto Reina y a las autoridades universitarias, que pusilánimemente se plegaron al gobierno, que cedieron autonomía y fuero, y permitieron que ese escarnio casi se consumara, no le queda otro camino que no sea arrepentirse y pedir perdón a la familia universitaria, al pueblo dominicana y a los familiares y camaradas de Silvano y de todas las víctimas del balaguerismo, de nuestros/as héroes y heroínas.
Ahora lo que procede es rescatar plenamente el mural de Silvano, derribar la pared que lo oculta y lo daña. Porque este pueblo quiere volver a verlo tal y como es, no a través de una proyección digital, no a través de versiones fotográficas. Lo que tiene gran valor es la obra en sí del maestro.
La pared que lo oculta debe ser tumbada sin contemplaciones. Y si no lo
hacen rápido las autoridades universitarias y y gubernamentales, lo haremos nosotros(as): los Círculos Caamañistas, las izquierdas comprometidas con sus mártires, los(as) profesores(as) con dignidad, los(as) estudiantes sensibles, el pueblo ofendido, agredido e indignado.
En lo que al panfleto monumental de García Espino se refiere, procede darle su segundo merecido: borrarlo completamente para cederle ese espacio a la Escuela de Arte de la UASD, para que junto a los maestros del muralismo de la Revolución de 1965 (Ramón Oviedo, Ada Balcácer, Dionisio Pichardo y otros(as), se encarguen de hacer un mural digno de la UASD y de la lucha de nuestro pueblo.
4 de febrero 2007 NARCISO ISA CONDE
