Washington — Adolescentes afronorteamericanos y latinos en posesión de un tocadiscos y con tiempo libre para gastar inventaron en los años setenta el hip hop, una música nacida en los Estados Unidos que ahora forma el centro de una enorme industria de la música y la moda en todo el mundo.
El hip hop nació hace treinta años en el sur del Bronx, un distrito de la ciudad de Nueva York, en un vecindario que parecía ejemplificar la desolación propia de zonas urbanas pobres.
Utilizando tocadiscos y discos viejos y desgastados, los jóvenes del sur del Bronx empezaron a recitar al ritmo de la música, generalmente en las calles y en los sótanos de las casas, en lo que entonces se denominaba una fiesta de la cuadra, y crearon un género musical y una forma de bailar totalmente nuevos. Este "recitar al ritmo de la música", o Mcing (rapping) o Djing (mezclar o rayar la música), se convirtió en la esencia de la música rap y del break dancing y el grafiti, dice Marvette Pérez, conservadora del Museo de Historia Norteamericana de la Institución Smithsoniana en Washington, que está organizando una nueva exposición sobre la historia del hip hop.
"En este lugar olvidado y desolado nació una tradición increíble", dijo Pérez en una entrevista con el Servicio Noticioso desde Washington.
Desde el principio, el estilo ha sido un elemento importante del hip hop, dijo Pérez. "El hip hop relata la historia de la música pero también la historia y el estilo urbanos de Estados Unidos".
"Con las importantes contribuciones que ha hecho la comunidad del hip hop, podemos incluir el hip hop en el contexto de la historia estadounidense y ofrecer una exposición completa", dijo Brent D. Glass, director del museo, al hablar con el Servicio Noticioso desde Washington.
El proyecto multianual del museo examinará el hip hop desde sus orígenes a fines de los años setenta, como expresión de la cultura de los jóvenes negros y latinos urbanos, hasta su condición actual como industria de 4.000 millones de dólares. Dijo Pérez que el museo ya ha recibido colecciones de artistas hip hop como Grandmaster Flash, Afrika Bambaataa, Kool Herc, Ice T, Fab 5 Freddy, Crazy Legs y MC Lyte.
"El hip hop es la contribución más importante al panorama cultural estadounidense desde el blues y el jazz", dijo el artista hip hop, promotor y cineasta Fab 5 Freddy, cuyo nombre es Fred Brathwaite, en una entrevista con el Servicio Noticioso desde Washington. "Domina la cultura juvenil de todos los países".
EL HIP HOP TRASCIENDE LAS BARRERAS RACIALES
"Una cosa que puede aplicarse a cada generación de adolescentes es la perentoriedad", dijo el productor de música y director cinematográfico Mark Shimmel. Todo acerca del hip hop—su sonido, letra, estilo, lenguaje—expresa ese sentido de urgencia.
El impacto sociológico y cultural de la música rock se vuelve insignificante en comparación con lo que ha logrado el hip hop, dijo Shimmel.
"El hip hop es la fusión más importante de las culturas negra y blanca que jamás haya tenido lugar en los Estados Unidos", dijo Shimmel. El hip hop es un relato sobre la música, pero es mucho más que eso. La música urbana, como la de Motown, "era para públicos blancos", dijo Shimmel, pero no se veían negros y blancos juntos en los conciertos.
El hip hop cambió eso, explicó, porque desde el comienzo trató acerca de la moda y el lenguaje, y—lo más importante—captó un sentido de urgencia con el que podían identificarse los adolescentes de las ciudades y los barrios residenciales periféricos.
"Al escribir los artistas del hip hop sobre el mundo que veían en los centros urbanos deprimidos de la ciudad, los adolescentes, tanto negros como blancos, reconocieron que el aislamiento que existía en los barrios residenciales periféricos no era muy diferente", dijo Shimmel.
La revista Ebony informa que hoy, dos de cada diez discos que se venden en Estados Unidos son de hip hop y el ochenta por ciento de quienes los compran son blancos.
Fab 5 Freddy, presentador del programa de televisión Yo! MTV Raps durante los años ochenta, ha dicho que el hip hop tiene éxito porque la música es "contagiosa" y porque le permite a la gente expresarse en forma positiva, dinámica y que despierta la conciencia. "El hip hop es para todos aquellos que tengan los oídos abiertos", dijo.
En 1985, cuando el álbum King of Rock, de Run D.M.C., se convirtió en el primer disco de hip hop "platino", premio que concede la Asociación de la Industria Discográfica de Estados Unidos a un artista musical o de artes interpretativas por la venta de un millón de discos, discos compactos o casetes, quedó claro, según Shimmel, que el hip hop había pasado de ser una música urbana afronorteamericana y latina para formar parte de la cultura blanca. En 2005, el premio Grammy para álbum del año se lo llevó Outkast, la primera vez que un álbum de hip hop ganaba ese galardón.
Dice Shimmel que el hip hop de hoy no difiere mucho de sus raíces en el sur de Bronx. "Toda forma musical evoluciona", dijo. "El hip hop nació en Nueva York, fue interpretado de forma diferente en Los Angeles y después el Sur le agregó otros elementos", dijo. "Ha evolucionado, pero no ha cambiado".
MIRANDO MÁS ALLÁ DE LOS ELEMENTOS ANTISOCIALES A SU IMPACTO MUNDIAL
Pérez reconoció que alguna música hip hop se destaca por su falta de respeto a la mujer, y añadió que el museo no piensa descartar ese aspecto del hip hop. El llamado rap "gangsta" de los años noventa, con su letra que promueve el uso de las drogas, la violencia y el "tagging", una forma de grafiti que demarca los territorios de las pandillas, es un elemento de la cultura hip hop que no se puede ignorar, dijo Pérez.
"Yo no lo juzgo", dijo Pérez. "Es lo que es. En general, la mayoría del hip hop es creativo y positivo, ocurre simplemente que lo peor del hip hop puede ser también lo que se vende más".
No puede descartarse el hecho de que el hip hop es una manera de caminar y hablar, dijo Pérez, ni que la influencia del hip hop, tanto en lo musical como en lo cultural, es mundial. "La técnica resuena en todas partes de Estados Unidos y del mundo", dijo Pérez.